APLICACIÓN PRÁCTICA DE INVENTARIO FORESTAL UTILIZANDO DATOS LIDAR: LA DEHESA III

Inventario tradicional vs inventario LIDAR

En la primera entrada se explicó en que se basa el LiDAR y su posible aplicación a las dehesas. En la segunda entrada se vieron cuáles son los objetivos de un inventario en dehesa y de qué manera pueden ayudarnos los datos LiDAR.

En esta tercera entrada, se exponen los diferentes tipos de inventario que se pueden utilizar en la dehesa y porqué el inventario usando datos LiDAR puede aportar información de gran valor para la posterior toma de decisiones.

De manera tradicional, los inventarios forestales en los que se realiza un muestreo estadístico (al azar, sistemático, estratificado…) de la masa para la obtención de variables de interés (Densidad, área basimétrica, volumen…), llevan aparejado un error inherente al muestreo y que depende del tamaño de la muestra a llevar a cabo, así como a la heterogeneidad de la misma.

Estos inventarios se diseñan para la obtención de las variables de interés con un error acorde al nivel deseado (cantón, tipo de masa, estrato, cuartel…). Los datos obtenidos en las parcelas correspondientes a un nivel, se extrapolan para obtener los datos globales a dicho nivel y con un margen de error. De esta manera, se obtienen densidades homogéneas a nivel de cantón, tipo de masa…

Otro método tradicional para obtención de variables de interés forestal es el inventario pie a pie, en el cual se conocen las existencias de manera pormenorizada desapareciendo los errores de muestreo, sin embargo, su elevado coste de ejecución hace que sean solo aconsejables para masas de alto valor donde el esfuerzo haga rentable la ejecución del inventario.

El “Método de árbol individual”, como método para el manejo de datos LIDAR, es lo más parecido al inventario forestal pie a pie, pero sin los costes que éste lleva aparejado. Con este método obtendremos con gran precisión la densidad de pies, sus diámetros de copa así como su distribución espacial en cada unidad inventarial de manera directa, mientras que de manera indirecta (mediante relaciones de variables) podremos obtener otras variables como son el diámetro, área basimétrica…

El principal inconveniente de este método es que se hace necesario disponer de una nube de puntos con una densidad adecuada para la masa que se pretende inventariar, ya que, si el dosel de copas es completo o trabado y la densidad de puntos no es suficiente, puede ser difícil diferenciar unos pies de otros. En el caso de la dehesa, al ser una estructura arbolada abierta, no se presenta ese problema, por lo que es en este método en el que nos vamos a fijar en próximas entradas para obtener datos precisos del arbolado existente en las dehesas.